Jacques Louis David - 1779, Les funérailles de Patrocle, The National Gallery of Ireland, Dublin
Interesante obra de juventud de Jacques Louis David (1748-1825), especialmente espectacular. El autor pinta una gran composición mitológica (uno de los grandes géneros del momento, junto al religioso y al histórico) llena de dramatismo, de claroscuros y con un torbellino de personajes y anécdotas que nada tiene que ver con la concreción que caracterizará Le Serment des Horaces (1784-1785), considerada una de las obras fundacionales de la pintura neoclásica.
El épico entierro de Patroclo, amigo y amante de Aquiles, sirve de excusa para una gran puesta en escena donde ofrendas, tesoros y sacrificios humanos se arremolinan para homenajear al héroe caído. Innegables influencias de Rubens, de su Amazonomaquia (circa 1619), y a Delacroix, en la célebre La Mort de Sardanapale (1827).
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